Los andadores estándar o tradicionales son uno de los dispositivos de apoyo más utilizados por las personas mayores y aquellas personas con movilidad reducida. A diferencia de los rollators con ruedas, estos andadores requieren ser levantados y avanzados con cada paso, ofreciendo mayor estabilidad y seguridad para quienes necesitan un apoyo más firme.
En esta guía completa te explicaré todo lo que necesitas saber sobre estos fieles compañeros de camino: desde sus características y beneficios hasta cómo elegir el modelo más adecuado para ti o un familiar.
¿Qué es un andador estándar?
Los andadores estándar o tradicionales son estructuras ligeras, generalmente de aluminio, que proporcionan un marco de apoyo para caminar. A diferencia de otros tipos de andadores, estos no tienen ruedas y deben ser levantados y colocados hacia adelante con cada paso.
Su diseño básico consiste en un marco en forma de U invertida con cuatro patas que terminan en conteras de goma antideslizantes. Las empuñaduras están situadas a la altura adecuada para que el usuario pueda apoyarse cómodamente mientras camina.
Estos andadores son ideales para personas que necesitan un apoyo sustancial y estable, como aquellas que están en rehabilitación después de una cirugía, adultos mayores con problemas de equilibrio o personas con debilidad muscular significativa.
Su diseño, simple pero efectivo, así como la ausencia de ruedas, los hace ideales para personas que se desplazan principalmente en superficies planas y lisas, como las del hogar. Ya que las puntas de goma en sus patas ofrecen un buen agarre en este tipo de entornos.
Tipos de andadores estándar tradicionales
Dentro de la categoría de andadores estándar, encontramos diferentes variantes para adaptarse a necesidades específicas:
Andadores fijos
Son los más básicos y estables. Su estructura es completamente rígida, sin articulaciones ni piezas móviles. Ofrecen el máximo apoyo pero requieren que el usuario tenga suficiente fuerza en los brazos para levantarlos completamente con cada paso.
Andadores plegables
Mantienen la misma estructura y funcionalidad que los fijos, pero incorporan un mecanismo de plegado que facilita su almacenamiento y transporte. Son ideales para personas que necesitan llevar el andador en el coche o guardarlo en espacios reducidos.
Andadores recíprocos o de paso a través
Diseñados para permitir un patrón de marcha más natural. Tienen una estructura que permite al usuario «caminar dentro» del andador, en lugar de detrás de él. Algunos modelos tienen un mecanismo que permite mover un lado del andador mientras el otro permanece estable.
Usuarios ideales de los andadores estándar
Los andadores estándar están diseñados para personas que necesitan un alto nivel de estabilidad al caminar pero aún conservan suficiente fuerza para levantar el dispositivo. Son especialmente útiles para:
- Personas mayores con problemas leves a moderados de equilibrio.
- Usuarios en procesos postquirúrgicos que requieren apoyo adicional durante la recuperación.
- Personas que se desplazan principalmente en interiores o superficies lisas.
Beneficios de los andadores estándar tradicionales
Estos dispositivos ofrecen numerosas ventajas que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de sus usuarios:
Mayor estabilidad y seguridad
Al no tener ruedas, proporcionan un apoyo más firme y estable que otros tipos de andadores. Esto es especialmente importante para personas con problemas graves de equilibrio o debilidad significativa.
Fortalecimiento muscular
El hecho de tener que levantar el andador con cada paso contribuye al fortalecimiento de los músculos de los brazos y la parte superior del cuerpo. Esto puede ser beneficioso como parte de un programa de rehabilitación.
Confianza al caminar
Para muchas personas, la sensación de seguridad que proporciona un andador estándar les permite moverse con mayor confianza, reduciendo el miedo a caerse y fomentando la actividad física.
Versatilidad en diferentes superficies
A diferencia de los andadores con ruedas, que pueden ser difíciles de manejar en superficies irregulares, los andadores estándar funcionan bien en casi cualquier tipo de suelo, desde alfombras gruesas hasta terrenos ligeramente irregulares.
Prevención de caídas
Según estudios recientes, el uso adecuado de andadores puede reducir el riesgo de caídas hasta en un 60% en personas mayores con problemas de movilidad. Esta es una estadística significativa, considerando que las caídas son una de las principales causas de lesiones graves en personas mayores.
Como me comentaba Pilar, de 82 años: «Desde que uso mi andador, he recuperado la confianza para moverme por casa. Antes vivía con miedo constante a caerme, ahora puedo hacer mis cosas con tranquilidad».
Inconvenientes de los andadores estándar
El uso de un andador estándar requiere fuerza en la parte superior del cuerpo, ya que es necesario levantarlo para avanzar. Esto que puede ser beneficioso para quienes tengan que fortalecer sus brazos o mejorar su coordinación, pero puede ser un desafío para algunas personas muy mayores o con movilidad reducida, por lo que, en estos casos, otros tipos de andadores, como los que incluyen ruedas, podrían ser más adecuados.
Además, los andadores estándar pueden ser menos maniobrables en espacios reducidos o al girar en comparación con los modelos con ruedas, lo que podría limitar su funcionalidad en espacios reducidos o áreas estrechas.
Por último, las puntas de goma en las patas del andador estándar, aunque ofrecen estabilidad, pueden no ser tan efectivas en ciertas superficies como alfombras gruesas o superficies rugosas o irregulares, dificultando su uso en exteriores.
Una desventaja importante es que, a diferencia de algunos rollators o andadores avanzados, no tienen asiento por lo que no ofrecen la posibilidad de descansar durante largos paseos.
Cuándo elegir un andador estándar
Un andador estándar es una excelente opción si:
- Necesitas máxima estabilidad al caminar.
- No planeas usarlo en terrenos irregulares o exteriores con frecuencia.
- Prefieres un dispositivo sencillo y fácil de usar.
- Tienes fuerza suficiente en brazos y hombros para levantarlo al avanzar.
Sin embargo, si necesitas mayor maniobrabilidad o planeas usar el dispositivo principalmente en exteriores, un modelo con ruedas, un rollator, podría ser más adecuado.
Testimonios y casos de uso
Las experiencias reales nos ayudan a entender mejor cómo estos dispositivos pueden cambiar vidas:
Carmen, 75 años: «Después de mi operación de cadera, mi terapeuta me recomendó un andador estándar. Al principio me resistía, pero ahora reconozco que me ha dado la seguridad que necesitaba para recuperarme adecuadamente».
José, 83 años: «Probé varios tipos de andadores, pero con mi Parkinson, el estándar me da más estabilidad que los de ruedas. Lo uso principalmente en casa, donde me siento más seguro con él».
Ana, 68 años: «Mi andador plegable es perfecto porque puedo llevarlo en el coche cuando voy a visitar a mis nietos. Es ligero y mi marido puede guardarlo fácilmente en el maletero».
Preguntas frecuentes sobre andadores estándar tradicionales
¿Cómo sé si necesito un andador estándar o uno con ruedas?
La elección depende principalmente de tu nivel de estabilidad y fuerza. Los andadores estándar son más adecuados para personas que necesitan mayor apoyo y estabilidad, mientras que los rollators son mejores para quienes tienen un equilibrio razonablemente bueno pero necesitan ayuda para caminar distancias más largas.
¿Puedo usar un andador estándar en exteriores?
Sí, aunque funcionan mejor en superficies planas y regulares. Para terrenos irregulares o exteriores, los modelos con ruedas delanteras pueden ser más prácticos.
¿Cómo puedo transportar objetos si mi andador no tiene cesta?
Existen bolsas y cestas que se pueden añadir a la mayoría de los andadores estándar. También hay delantales especiales con bolsillos que se pueden usar mientras se utiliza el andador.
¿Cuándo debo reemplazar mi andador?
Considera reemplazar tu andador si notas cualquier daño estructural, si las piezas ajustables ya no funcionan correctamente, o si tus necesidades han cambiado y requieres un tipo diferente de apoyo.
¿Puede ajustarse la anchura de un andador estándar?
La mayoría de los andadores estándar tienen una anchura fija, aunque algunos modelos premium ofrecen ajustes limitados. Si necesitas una anchura específica, es mejor buscar un modelo que se adapte a tus necesidades desde el principio.
¿Los andadores estándar están cubiertos por la seguridad social o seguros médicos?
En España, la seguridad social puede cubrir parte del coste de un andador con prescripción médica, aunque generalmente con modelos básicos. Los seguros privados varían en su cobertura, por lo que es recomendable consultar directamente con tu aseguradora.
¿Cuál es la vida útil media de un andador estándar?
Con un uso y mantenimiento adecuados, un andador de buena calidad puede durar entre 3 y 5 años. Las piezas de desgaste como las conteras pueden necesitar reemplazo más frecuente.
Conclusión: El compañero perfecto para una movilidad segura
Los andadores estándar tradicionales representan una solución probada y fiable para quienes necesitan un apoyo sustancial al caminar. Su diseño sencillo pero efectivo ha ayudado a millones de personas a mantener su independencia y calidad de vida a pesar de limitaciones físicas.
La clave está en elegir el modelo adecuado según las necesidades específicas, asegurarse de que esté correctamente ajustado, y aprender a usarlo de manera apropiada. Con estas consideraciones, un andador estándar puede convertirse en un aliado invaluable en el día a día.
Como cuidadores o familiares, podemos ayudar eliminando el estigma asociado a estos dispositivos y enfatizando cómo pueden mejorar la independencia y seguridad. Después de todo, no se trata solo de prevenir caídas, sino de mantener una vida activa y satisfactoria.
Mi nombre es Hugo Fernández, y llevo más de 20 años dedicándome al cuidado y bienestar de las personas mayores. Mi experiencia no solo proviene del ámbito profesional, sino también del personal, ya que he tenido el privilegio y la responsabilidad de cuidar a mis padres y a un tío durante años.